Preparación: 20 minutos
Cocción: 45 a 50 minutos
Raciones: 4
Ingredientes:
120 g de pechuga de pavo cocida, sin piel
20 g de leche de coco en polvo
1 pimiento rojo, sin semillas y picado
Sal y pimienta
1 cucharada de harina de maíz
1 cucharada de perejil fresco picado finamente
Para el caldo:
La carcasa de un pavo de unos 3 kg
2 cucharaditas de semillas de cilantro
100 g de zanahorias, picadas
1 tallo de apio, picado
1 rama de canela, de unos 5 cm, en trocitos
4 clavos de olor
1 cucharadita de semillas de comino
4 dientes de ajo grandes, sin pelar, ligeramente aplastados
Un trozo de raíz de jengibre, de unos 5 cm, sin pelar, rebanada
1 cucharadita de melisa
225 g de cebollas, sin pelar, cortadas en cuatro
Para decorar: tiras de pimiento rojo (opcional)
- Haga el caldo primero. Divida la carcasa de pavo en pedazos manejables y machaque las semillas de cilantro en un mortero.
- Coloque los huesos de pavo y las semillas de cilantro molidas en una cacerola grande, añada 1 1/4 litros de agua y los demás ingredientes del caldo. Caliente hasta que suelte el hervor, baje la llama a fuego bajo, tape y cocine durante 35 a 40 minutos.
- Mientras tanto, pique finarnente la pechuga de pavo.
- Retire del caldo los huesos grandes del pavo; cuele el caldo, a través de un cedazo, en un bol para medir. Deben ser 750 ml; si no es así, añada agua hasta completar esta cantidad.
- En una cacerola grande, ponga la leche de coco en polvo y agregue el caldo que midió. Ponga a calentar a fuego moderado y revuelva bien, para deshacer los grumos.
- Cuando la mezcla de coco empiece a burbujear, reduzca la llama y agregue el pavo, el pimiento rojo picado y sal y pimienta al gusto.
- Mezcle la harina de maíz con 1 a 2 cucharadas de agua fría, incorpórela a la sopa y revuelva durante unos 2 minutos o hasta que espese.
- Añada el perejil fresco, revuelva un poco, retire la sopa del fuego y sirva. Decore con tiritas de pimiento rojo, si lo desea.
Variación: también puede hacer el caldo con los huesos de dos pollos grandes.